UN DÍA SIN PLANES
Hoy desperté, no me lave la cara ni los dientes, no cepille mi cabello, ni tampoco me cambie la ropa de dormir, me quede recostado en la cama; sí, tenia actividades planeadas, cosas por hacer, tareas que cumplir, pero, simplemente no tenia la motivación suficiente para salir, pueden llamarlo flojera, cansancio no era, solo era yo mismo, protegiéndome de mi mismo.
Muchas veces nosotros nos afanamos haciendo planes de lo que haremos hoy, lo que haremos mañana, de aquí a una semana, un mes, un año, dos años, tres, cuatro, toda tu vida; queda claro que tener metas u objetivos en esta vida es importante para no perder el rumbo, pero aveces, solo de ves en cuando es bueno olvidarte de todo eso y tener un día sin planes y hacer lo que te venga en gana.
Y como se los contaba, luego de haber estado recostado todo el tiempo que quise, me levante, no mire ningún espejo, baje las escaleras en busca de cereales con frutos secos y yogur, el silencio del momento fue mágico, por primera vez después de mucho tiempo pude percibir el sonido de aves cantando, a pesar de la hora.
Disfrute bastante de mi plato de cereal, lo prepare como lo hacia en las épocas en las que iba al colegio; poco cereal, doble de frutos secos y el mix de dos yogur, sin embargo en el fondo de ese magnifico momento escuche el sonido molesto de algo conocido; la alarma del despertador, no entendía porque, se supone que ya debía estar apagado, pero el sonido se iba haciendo cada vez mas intenso, entonces me di cuenta !oh no¡ todo era un sueño, como es posible que mi mente juegue así conmigo, me levante bruscamente, saque la toalla me asee, peine adecuadamente mi cabello, acomode mi corbata y salí, no había tiempo para prepararme ningún desayuno ya tomaría un café de maquina en la oficina; pero mientras manejaba pensé en lo que soñé y solo pude pensar...
Que bueno seria tener un día así y comencé nuevamente con mi rutina.
Muchas veces nosotros nos afanamos haciendo planes de lo que haremos hoy, lo que haremos mañana, de aquí a una semana, un mes, un año, dos años, tres, cuatro, toda tu vida; queda claro que tener metas u objetivos en esta vida es importante para no perder el rumbo, pero aveces, solo de ves en cuando es bueno olvidarte de todo eso y tener un día sin planes y hacer lo que te venga en gana.
Y como se los contaba, luego de haber estado recostado todo el tiempo que quise, me levante, no mire ningún espejo, baje las escaleras en busca de cereales con frutos secos y yogur, el silencio del momento fue mágico, por primera vez después de mucho tiempo pude percibir el sonido de aves cantando, a pesar de la hora.
Disfrute bastante de mi plato de cereal, lo prepare como lo hacia en las épocas en las que iba al colegio; poco cereal, doble de frutos secos y el mix de dos yogur, sin embargo en el fondo de ese magnifico momento escuche el sonido molesto de algo conocido; la alarma del despertador, no entendía porque, se supone que ya debía estar apagado, pero el sonido se iba haciendo cada vez mas intenso, entonces me di cuenta !oh no¡ todo era un sueño, como es posible que mi mente juegue así conmigo, me levante bruscamente, saque la toalla me asee, peine adecuadamente mi cabello, acomode mi corbata y salí, no había tiempo para prepararme ningún desayuno ya tomaría un café de maquina en la oficina; pero mientras manejaba pensé en lo que soñé y solo pude pensar...
Que bueno seria tener un día así y comencé nuevamente con mi rutina.
Comentarios
Publicar un comentario